De las creadoras de «camisetas feministas que te incitan a salir a la calle a reivindicar tus derechos puño en alto». Ahora llegan «¡sudaderas molonas que te incitan a salir a la calle a reivindicar tus derechos puño en alto, pero llévate algo por si refresca y te pillas un catarro!». Útiles, necesarias e imprescindibles, ya lo ves.
Por qué llevar sudaderas feministas ayuda a la lucha contra el patriarcado
La sudadera es esa prenda que tiene la cualidad innata de reconfortarte en los momentos que más lo necesitas. Cuando llegas a casa reventada después de un día duro de trabajo. Cuando llegas de fiesta a las tantas de la noche y no eres capaz de entrar en calor. Cuando estás enferma y quieres algo abrigadito y cómodo. Los días de zafarrancho doméstico (siempre con corresponsabilidad, ¡recuerda!) O simplemente cuando quieres pasar una tarde de domingo en el sofá, con tu bol de palomitas, tus películas de zombies, tus chocolatinas y tu pobre sudadera llena de lamparones, que no son lamparones, sino condecoraciones por el pedazo de homenaje que te estás pegando, ¡guapa!
Las sudaderas de Cosas Feministas están a otro nivel. No pueden compararse con el resto de sudaderas feministas del mercado. Sus mensajes, las imágenes, la fuerza con la que llegan, la calidad del tejido, las mangas, los puños y las capuchas, ¡madre mía, qué capuchas!
¡Desde ahora en adelante, la sudadera queda establecida como prenda representativa e icono del feminismo! ¿Pero no eran los sujetadores? ¡Los sujetadores aprietan y a muchas no nos va el rollo de llevar los pezones aprisionados! ¡Libres domingos y domingas! Si te compras una sudadera feminista, por favor, cómpratela aquí, que ves que nos falta un verano…